14.6.09

descomposición

descomponer los colores del alma hasta la última consecuencia
donde ya no queden grillos que canten ni reflejos eternos,
donde ya tan transparente ni siquiera pueda percibirse el sabor de las batallas perdidas,
sólo la esencia de los que responden
todo grito de ayuda y también
toda esperanza,
sentirse poseído por la fugacidad de esa desfiguración
ni cruel ni sabia
ni tu boca ni la mía, sino todo lo que surge después
todo lo que nos sucede
sentirse vivo, sentirse eterno,
sentir que ahí viene otro tono a empaparnos lo que ya ni siquiera es
una cara
no tiene forma, salvo eso que se aproxima
a desmenuzarnos, justo ahora
que somos dos
y somos
nada.

the bends

Con vos no hubiera pasado. Ni esto, ni nada, ni necesitar salir de casa porque ni siquiera habría estado en casa. Con vos se van las mariposas, los veranos y la escarcha del invierno que tanto nos gustaba mirar por la ventana. Se van las flores, los acordes más felices y los más perturbadores. La casa que ya no habito. La cama en la que no duermo. Los olores que ya no siento. Las sensaciones que no recuerdo. La vida que ya no vivo. Y me muero, mi amor, me muero.