5.3.13

4.3.13

respecto de hoy y varios días,
te necesité a la mañana
pero no quise interrumpir

hablé de casi todo lo pertinente
y como cómplice, como hace mucho, fuiste el único

está bien, me voy a arrepentir
lo decís siempre

respecto de la pintura del techo,
en cualquier momento se cae

y me hace pensar en lo que tengo abajo de la tapa,
que seguramente te perjudique
pero prefiero que se caiga sola

lo importante era esto: anoche fui al teatro
nunca me dejaste ver esa película
pero te compraste la banda sonora
uno de los primeros discos, sí

de cualquier manera cuando llegué a la mañana
y probablemente por la razón anterior,
no quise nada, excepto verte
ni siquiera esta casa a tu nombre

necesitaba hablarte de

de cuando me crezca el pelo.

27.2.13


te podés olvidar
de mi cumpleaños

y podés pensarme olvidando a mí
aunque nunca pude odiarte bien,
al infierno ida y vuelta
y carajo, que nos acordamos
del día en que mejor nos hicimos

he ahí la reverencia
y la adoración por el piso


lo que más me gusta de los dos
es saber que existe.

25.2.13


1

intenso pero tan sutil, tarde
 hablar de lo mismo
cuando ya no tire, y nos gusta la llaga
no lo ayudo a quererme

2

hace un rato hablé de él, del cordero
entiende
quiero decirles, ignorar la fuerza y no medirla
desaparecería aunque me enseñó a estar en deuda

3

desafinada pero no inconmesurable
irracional como el hemisferio izquierdo
llegar al fin sin haberlo hecho todo
el dolor de verlo eterno
y en el cuerpo hablar de los dos
construirnos con el ideal de nosotros de fondo
fantasía interdimensional cada diez noviluvios

4

no materializo ni duro medio round
no muevo nada, sólo sé antes de que pase
lo escucho antes que los silvestres
aunque querría ser uno ahora

5

se lo dije
necesitaba entender que no sucede en este plano
que transmigrará

atraviesa el espiral como línea en cualquier punto
me alejo
no lo soporto dialécticamente aunque lo adoro

6

miedo y simplicidad
catástrofe es que el plano no nos contenga
entiendo el fin del mundo, tener los pies sobre la tierra
pero él se va para abajo

7

diez orgasmos en veinte minutos es realidad y no promesa
lo que me hace en la cabeza lo precede
y volverlo descartable es la fantasía más grande, aunque ya dice serlo
siempre lo reciclan y vuelve a terminar conmigo

8

no vio la vida anterior, porque fue corta
cree que soy ella
trata de redimirme sin chance
y le quedan vanidades por agotar

9

no está en mí ser vos en ninguna de mis formas
estás listo y quiero tardarme
ser idiotas, no el big crush
el tiempo me corre igual en arquitecturas diferentes

10

no quiere cambiarme cuando me llama amor
pero no cura mi lobo secularizado
me es intrínseco creer que ha visto las flores
aunque yo viva en simultáneo

11

lo que fagocite primero gana
deshacerse de los síntomas no es toquetear la causa, y no quiero vivir sin ella
sólo ama
los puntos de inflexión en los que clava la aguja para trazar su hilo-lineal

12

a vos te amo, pero está escrito
cosmos, vía láctea, yo, vos
el panorama se centrifuga
aunque él iba de menor a mayor

13

soy responsable, he ahí la distancia
no me significa ni me lo pide
no lo reclamó, es mi película

14

nos vamos a comer
porque fusionar es derretirse, aún ser todo terreno
mis palabras son puertas de salida
de cualquier forma me estoy escapando, precisamente de vos

15

estoy mucho más sucia
aún en sus palabras de mentira
no sé para quién trabaja mi cabeza, ni tengo vida para preguntárselo
nunca hablamos de la salida

16

las horas
no son nada en comparación con lo que serían
pero funciona igual

17

me sonrió el dueño de la tabaquería
quedé así, como sabés
el mundo se acaba más tarde

18

te dije casi todo lo que quería, ¿te hago el favor de salir?

Te acostaste a dormir temprano. Porque antenoche… saliste, anoche nada. Nadaste entre un montón de gente y llegaste lo que se dice temprano para aquellos que no se acuestan tarde. Y a las cuatro de la mañana se te despegaron los ojos, aunque tenías uno más o menos pegado. Creés estar engripándote. Y deslizaste tu mano suavemente por la sábana para alcanzar la mía, que todavía dormía. Te escuché decir que te habías desvelado, y yo me senté en la cama y usé la pared de respaldo para prenderme un pucho y preguntarte cosas. Creo que te digo que me encanta dormir con vos. Y terminás refregándome la barba en el cuello y los humos de nuestros cigarrillos se hacen cosquillas. Te busco con los dedos ansiosamente, desesperadamente, como con miedo de que no estés. Te levantás a hacer café para los dos, pero al final yo sólo tomo agua. Te quedás mirando la pared de enfrente fijo, cómo se mueve la cortina y las primeras rayas del amanecer, y me contás algo de cuando eras chico. Me quedo escuchándote, mañana no importa tanto. Y terminamos de nuevo tirados en la cama, y cada uno se da vuelta para su lado, pero nos seguimos tocando las espaldas, y por momentos los pies. Me doy cuenta que anoche me acosté a dormir temprano. Porque antenoche salí, nada. Nadé entre un montón de gente y llegué lo que se dice temprano para aquellos que no se acuestan tarde. Y a las cuatro de la mañana se me despegaron los ojos, aunque tenía uno más o menos pegado. Creo estar engripándome. Y deslicé mi mano suavemente por la sábana para acariciar el borde. Te busco con los dedos ansiosamente, como con miedo de que no estés, y te sigo buscando hasta quedarme dormida. Donde carajo sea que estés, bajo la forma que tengas, un ruido súbito te despierta como a esta hora, abrís los ojos, dilatás el pecho, no entendés nada, te tapás con la colcha de lana, das media vuelta y te volvés a dormir. 

24.2.13



felicitaciones
nariz de oso que sangra

hablábamos de las cosas sucias

rabiando como locos
(lo habremos estado)

ahora está todo lleno de tierra

vos querías
que te enjuague la cabeza
lejos de casa

que te bautice
y te vuelva puro
aún con sangre en las manos

vos querías salir a pasear sin correa
las últimas tres veces que nos vimos.


entonces la tomé por la cuchara
era difícil comer
después de tanto
encontrarte de nuevo hablándole a los fantasmas
escritos en la pared
por el morbo de creer que el papel es algo que puede borrarse
pero si la humedad no destiñe
tampoco entiendo bien qué carajo estamos haciendo
te quiero porque finalmente
podemos volver a casa
a cambiarnos
a cambiarnos por algo mejor
a bautizarnos de nuevo
porque la calle está tan dura como mi cabeza, pero
bien que en el fondo somos blanditos
esperando por encontrarte
con ese que no te pregunte
de dónde venís
qué hiciste
y mucho menos a dónde carajo estás yendo
de alguna manera redimirte
caer rendido
estar terriblemente cansado
que es tan pesado como sentir que no estás
si lo decía otro sonaba estúpido
pero creo que era relevante recordarte
que si sólo si
somos amor

Soy un rockstar malherido, me rompí la cabeza cuando salté del escenario para ser adulado por quienes vinieron a verme. Perdí una zapatilla por ahí atrás antes de subir, y todos me vieron la media de algodón con un agujero en la punta, gastada por los cientas de pasadas por el lavarropas automático con jabón blanqueador que hoy planchó mi vieja y los dejó sobre mi cama.
La enfermera dijo que tenían que darme puntos, pero en el flipper necesitás demasiados para poder seguir jugando, y sobretodo cuando te quedaste sin fichitas y luchás por no darle al agujero, luchás para no alcanzar el sátiro game over.
La gente se pregunta qué escucha un rockstar cuando está con una minita, quieren que lo digas ante un periodista mal pago que se atreve a escribir de rock, quieren que lo grites, que lo repitas una y otra vez por cadena nacional, interrumpiendo las novelas de la tarde.
Deberían saber que a mí también se me pegan las canciones de Arjona que pasan por la radio y que llevo veinte años de resaca contínua, que le pago a los fotógrafos para que no suban a flickr las fotos en las que salí mal, o se me ve la pancita, en las que estoy con minitas de pelo largo que después de las cuatro de la mañana me quiero llevar a la cama de una plaza de mi cuarto de pendejo.
Se me parte el bocho de sólo pensar que después de esto dormiré dos horas antes de tomarme el tren para ir a mi laburo de telemarketer de Congreso en el que no contemplan heridas de pachanga nocturna y me sacan el presentismo.
En el trabajo quiero ser ese que te llama para decirte que es el mejor día de tu vida, que estás hablando con el rockstar de tus sueños, pero tengo que ser el tipo que te llama para decirte que si contratás el servicio de ADSL que te ofrezco, te bonificamos los primeros tres meses, y te damos tres más a mitad de precio.
Ésta noche soy un rockstar malherido que deposita su confianza en un residente de medicina que no hizo una sutura en su puta vida. Un rockstar que no tiene obra social y labura en negro porque nunca superó los nefastos tres meses de prueba, que a veces se vuelven tres años, el que hace tiempo dijo en un programa de radio que todos quieren ser como él, que todos quieren arrancarle un pedazo.
Soy un rockstar malherido que en sus ratos libres te llena la bandeja de spam, y que nunca aprendió a tocar la guitarra.

26.1.13


yo te digo que ahora no me importa nada
porque probablemente me importe

pero fue un cómodo paso de los días

y si pronto nadie sabe dónde estoy, tengo para decir

que esta noche la luna está retorcidísima.

13.1.13


una lista repleta
de lo que no habrá
y ya no debe hacerse

está bien, es
increíblemente justo
y sucede

gracias a las aristas de las cosas

debería decir
que se siente bien
ahora tener una libertad
que no es necesario compartir

pero la verdad es que no se siente
no se siente pensar en volver a casa

es gracioso el tiempo que llevaba sin llorar
a pesar de las circunstancias
o poder nadar en todo el ron del mundo
privada del tacto
y por favor ya no tocar a nadie

y en lo posible nadie me toque a mí
excepto para lastimarme

detesto la forma de las cosas
sin importar cuántos lados tengan

finalmente detesto.

11.1.13


-          Acerca de lo estúpidas que son las fotografías de las cajas nuevas de cigarrillos.
-          No son tan nuevas.
-          Tampoco fumé tanto.
-          Refrescó, querida.
-          Debe haber menos humedad, aunque sabés qué la testea hace un tiempo largo.
-          Lo que sea que se haya metido debajo de la letra “o” de tu teclado.
-          Ah, cierto que es mío y que no escribís vos nunca.
-          Yo no escribo hace un año, no jodas.
-          Cierto. Como si quisiera andar por ahí buscándome algún reventado con la extraordinaria capacidad de sacarte brillo.
-          Lo hicieron bien…
-          Hace un par de noches, de cualquier manera, estabas increíblemente contento. Obtuviste lo que querías.
-          Sí y no. Verás, no me interesa en absoluto el sufrimiento ajeno. Sólo trataba de recordarte que existo, te comportaste acorde a las circunstancias, te felicito, dame un mes.
-          Me estás cansando.
-          Jamás lo suficiente como para que me dejes ir. O me mates o algo. ¿Averiguaste cómo matarme? Te hice resistente a cada porquería que te dejaste meter en el cuerpo. ¿No te habían dicho que de ser una drogadicta iban a tener que subirte las dosis de todo y dijiste que no? Ves, estabas mintiendo. Me querés todavía.
-          Sinceramente, accionás dónde se te canta. Ya me tiene sin cuidado. Te encantaría que te grite…
-          Pero le gritás a los demás, eso está claro. Tenés cuentas pendientes conmigo, podrías empezar a saldarlas. Yo te iba a llevar a donde más querías.
-          Te tenés fe cuando me ponés a escribir, demasiada para creer que no podría renunciar a ello.
-          Tu talento puro está completamente de mi lado, no podrías sin mí. Y ya ves lo que pasa cuando me corrés a un costado. Creés que me dejás incinerarme solo, cuando en realidad siempre encuentro alguna veta repugnante en tus inescrupulosos actos y me dejás escapar.
-          Adorás tus cinco minutos de fama, te olvidás del lugar en el que vivís.
-          Estás sugestionada. Creés que me vas a ahogar por ahí. En Concordia probablemente. Que me vas a estrujar cual insecto: no recordás de dónde salí.
-          No me va a tomar demasiado tiempo.
-          Ahora explicame, pequeño monstruito, por qué delirás con saber por qué te alejaste de los que realmente te conocen.
-          Me doblás en intelecto, lo entendés.
-          Se me ocurre que creés que podés sostener tus mentiras a muy largo plazo si ya nadie puede refutártelas.
-          Correcto, ahora jugá a otra cosa.
-          Mentira. Todavía sabés mentir, sólo no podés hacerlo conmigo. Todavía me necesitás.
-          En parte.
-          No vas a escribir un carajo sin una musa. Y yo soy todas ellas.
-          He escrito con felicidad y te recuerdo que ahí no estabas.
-          Explicame ahora cuando fue la última vez que escribiste feliz y te permito retirarme la palabra. Pensás que me vas a matar con la pastilla que te claves esta noche, si, sólo si te voltea.
-          Cierto que si no lo hace volverás en la forma de algún sueño espantoso el cual recordaré mañana y sabré que no dormí por tu culpa.
-          Trabajo mientras dormís, no seas idiota.
-          Tu deber es mantenernos con vida, nunca te olvides de ello.
-          Te voy a perseguir hasta la próxima.
-          No si te desaparezco en esta…
-          No vas bien en absoluto, nena. Trabajo para el mejor postor, estoy cómodo.
-          Y supongo que por eso desaparecés la mayor parte del día…
-          Solés aburrirme, hasta que me recordás.
-          Se te están terminando los años de gloria. No soy la única que te lo dijo.
-          Casi que te gano como treinta y cinco veces, no tenés muchas otras debilidades.
-          Barajá, estúpido, tiene que durarme toda la semana la caja de cigarrillos.
-          Es viernes. Ducasse. Los viernes son míos.
-          Estás en la casa de mamá, sabés que acá no corre el tiempo.
-          Ah, pero sí que corre. No creas que no sé cuando mirás el relojito insulso.
-          Si te aislo estás en la freidora.
-          Me vas a extrañar. Me extrañás siempre. De hecho querés dejar todo lo que te aleja de mí, porque lo hacés.
-          Porque te echo la culpa de la mayoría de las idioteces que nos hacés hacer.
-          Pero yo soy perfecto, vos no.
-          Perfecto sería reventarme un oído y ya no tener que escucharte.
-          Tenés otro, ya lo discutimos. Con ese querrás oírlo todo, inclusive a mí.
-          Cuando te encuentres algo que quiera vengarte la muerte quizás volvamos a hablar.
-          En algún planeta autocreado de mierda. La primera vez que te hartes voy a estar ahí. Y la segunda, y la tercera.
-          Y la cuarta, y la quinta. Te quedan muchas menos fichas.
-          Dijiste que el tiempo no corría. ¿Y qué si aún las tengo todas?
-          Esta noche no te las veo.
-          Pero son las más caras y sabés que podría jugártelas.
-          ¿A cambio de qué?
-          Pregunta de quinceañera boluda, estás grande.
-          Algunos días.
-          Quiero un trato.
-          Olvidate.
-          ¿No te cansás? ¿Ni un poquito? ¿Nunca? Ves, ahora sí te duele.
-          Es la silla.
-          Conociéndote, podrían ser hasta los murciélagos.
-          Pero es la silla.
-          No te costaría intentar.
-          ¿Y si pierdo qué?
-          La estirpe.
-          Olvidate.
-          ¿Qué soñaste anoche?
-          Que volvías a llevártelos.
-          Ahora nos entendemos.
-          Pero después conté los días, no habría manera.
-          Ves, estás soñando lúcido. Ahora nos entendemos mejor.
-          La pastilla y rajás como por diez días. Veinte si subimos la dosis.
-          Y estaré exactamente en el mismo lugar.
-          No te los llevarías, no te los podés llevar. Y te voy a explicar por qué. No me pertenecen.
-          Pero los mandás al pandemonio igual.
-          Yo también me habría traicionado de ser ellos y sin embargo están de mi lado. Te estás quedando solo.
-          ¿No era que no podía ni tocarlos?
-          Si te dejan, estaría bien, cobrate sangre. Pero mía, y nos vamos juntos.
-          Qué aburrido, sobrevivirías. Y si te internan esa vez vas a tener más que manchones blancos.
-          ¿Más que doce puntos, decís?
-          Ninguno que no puedas arrancarte.
-          Tus manotazos de ahogado ya no me divierten.
-          Está bien, tené tus veinte días. No creo que te los merezcas. Pero al menos tus piernas sí.
-          Hablás como si no las usaras.
-          Las tomo prestadas, a las cuentas las arreglamos acá. Y cuando lo hagas volver, nos harás volver a todos.
-          No vuelve.
-          Siempre vuelve. Él también habla solo. Y nos lee, querida.
-          Cómo te gustaría…
-          Mataría por tenerlos a ambos de nuevo.
-          A esa la quiero ver.

8.1.13


ayer me saqué la venda que tenía puesta desde el sábado
eso pasa con las cosas impermeables
aún así seguía intacta
hubiera podido dejarla una semana más

pero no, porque picaba
y cuando pica es bueno
o algo así

en realidad fueron mosquitos
en la puerta de lo de sandra el domingo

pero me volví a mirar al espejo, voilá, chapeau, esas cosas
cicatrizó la parte de arriba, porque
claro
sólo la toquetearon la primera vez
y están desapareciendo de a poco las rayas horizontales

mientras estoy en casa
leyendo
una tonelada de aventuras ajenas
que me gustaría poder llegar a vivir
si tan sólo no estuvieras asfixiándome.

no entiendo cómo podés leer a las oscuras
lo más gracioso
de todo
es que en un tiempo ya no será verano
y me voy a arrepentir

porque voy a estar en casa
y el teléfono será una extensión de mi mano
llamando a otro que pueda lamerme la herida
pero no serán estos
que tanto me cuesta ver
y permitime decirte que es tu culpa
porque me arrastrás bajo amenaza
de tu espada monógama
a una vida de sufrimiento

¿no ves que soy un animalito?

y vos no vas a entender
que cuando me despierte de todo esto
estaré más vieja
y habré perdido el tiempo.
mis hermanos tienen un pez hijo de puta
que esta tarde casi se muere
y tuvimos que aislarlo y curarlo con azul de metileno
acabo de pasar por al lado de su pecera
y está como nuevo

hace un rato me preguntaron dónde
y contesté que era la peor para saberlo
y además llueve
que no hace demasiado tenía una vida
y le pedí que se muerda la lengua

tiene razón en gran parte
este viaje no es más que la manifestación de mi falta de vida
me la paso de la cama al living como en casa y ni siquiera es casa
y así estuve durante mucho tiempo
desperdiciándome

me succionaron el alma
con cada acto por intentar domesticarme
y me compré la cámara sólo para convencerme
que todo objeto ante mí podía llegar a enfocarse
con más o menos esfuerzo
como si volver a los lentes pudiera sanarme el astigmatismo

como si esta cicatriz asquerosa no manifestara una herida
que me habla de lo mucho que he errado
como si no pudiera sospechar que mientras duermo como animal sedado
se acercaran sanguijuelas a mi lecho
y todos las noches me succionaran lentamente

mis hermanos se compraron el pez hijo de puta
cuando yo los dejé solos
porque sentían que se volverían más responsables
si tuvieran algo que cuidar ahora que nadie cuidaría de ellos

pero ese pez sana todas las escamas que se rompe intentando escapar de la pecera.

2.1.13


and be grateful. our scars have the power to remind us that the past was real.

19.12.12

día 1



fumaste el último después del desayuno
e intentaste dormir
y bañarte
y sacarte los aros
pero papá te acariciaba la cabeza y estaba extremadamente molesto
no tenías miedo pero tenías hambre
te enojó el paso del tiempo
las sillas de ruedas son aburridas
les diste un beso
y pablo te agarró la mano en el quirófano
te pidió que pienses en algo lindo
mientras decía que sus residentes no sabían quién era edith piaf
y te acordaste del pelo largo de victoria, y de leandro
te despertaste boca abajo
gemiste para que te arrancaran el tubo, y dijiste “hey, estoy despierta”
pablo dijo que ya estaba, le preguntaste qué hizo
dijo que había fijado
y el dolor de la herida era insoportable

lo que pasó de la puerta para adentro
el ataque de pánico

deshuesé un pollo a las 9 de la noche
la pierna siguió doliendo
y casi no pude dormir
pero el alplax

16.12.12

you know i'd love to waste it again if i could have it back

28.11.12


posta que había salido al patio, no es nuevo
y pensé en él antes de que sonara el teléfono
pero también tuve mucho tiempo para todo esto

no salté del avión ayer
y tampoco me levanto temprano mañana

como cuando no quiero viajar
y la mochila no se llena por sí misma

como cuando no quiero morir
entonces queda todo desordenado
esperando volver a casa

casi como acostarme con el gato
haciéndonos creer que vamos a dormir juntos mañana
pero no, y por muchos días no

si mañana no vuelvo
hay cosas para hacer en el cajón
y si mañana nos vemos en los sueños
en un trip trip trip
creo que no lo hicimos tan mal.

21.11.12

Hoy vas a gritar-gratis.